lunes, 30 de mayo de 2011

LA BODEGA SAN MATEO

Jóvenes, ochenteros e ilusos...
Cómo iban a imaginar que pronto caería la tormenta de granizo..

HOMENAJE A MOLLEDA

Hace años conocimos a MOLLEDA como habitante de la noche que sacaba a la luz las verdades ocultas, como amante de Madrid que no quería ver la cochambre en que se había convertido la ciudad y por eso sólo salía al encenderse las primeras farolas... A veces se encerraba a pintar en compañía de sus gatos y de una cacatua -extraña combinación- y se le confundían la noche y el día... Pintor y dibujante, humorista desde la etapa de La codorniz y Hermano lobo hasta los días turbios y esperanzados del 15-M... "Los ojos abiertos" rinde homenaje a uno de sus más ilustres lectores.

martes, 24 de mayo de 2011

70 CUMPLEAÑOS DE BOB


Un primo mío encontró un guiri excéntrico por unas bocacalles de La Castellana. Caía la canícula de agosto, pero el tipo, sin inmutarse, gorro negro de lana, una rebeca a juego, botas de cuero español… Era Dylan, que en su never ending tour, había recalado en el foro rumbo a dylanizar Villalba, Guadalajara, Cuenca, Gredos y otros rincones patrios. Mi primo le abordó en las calles vacías: Hello, Bob, ¿me puedes firmar un autógrafo? La respuesta fue muy Dylan: NO (pronúnciese Nou, con voz de galleta vieja y cascada).
 
Maldito judío, pero…qué gran artista. Por eso hoy queremos celebrar su 70 cumpleaños, pinchando (aquí en Los ojos abiertos somos más de vinilo, como nos enseñó el maestro), pinchando… ¿Highway 61, Slow train coming, New morning? Las posibilidades son infinitas…

 
Querido señor de la pandereta, si en algún punto de tu gira perpetua, recibes esta felicitación, deja tu pianito chungo, acércate a un cibercafé y ponnos unas palabritas no más. Thank you...

EL AGUA

La plaza queda más abajo de Atocha, como una isleta entre dos avenidas de tráfico rodado, y por eso va poca gente. Es a la vez muy urbana y muy recoleta. Mola. Hay unos pinucos, una estatua militarista (de los “hombres ilustres”, creo) y el suelo de arena, como en las plazas de antaño.

Una vez al año, y siempre por estas fechas, suelo ir a sentarme a la plaza, por aquello de la nostalgia. Es lo que tiene vivir en “la gran ciudad”, que puedes estar años y años sin pisar un sitio, incluso puedes morirte sin conocer alguno de sus rincones. Pero hoy además coincidía que tenía que hacer unos papeles por la zona. Incluso llevaba, como otras veces, una novelilla de Simenon/Maigret para leer en un banco.

Iba con sed además, y pensaba echar un trago de agua en la fuente que había en la plaza. HABIA, digo. Todavía el año pasado estaba, la fuente de agua corriente en torno a la cual se sentaban los carrilanos y los niños rellenaban sus pistolas de agua. Hoy me encuentro  que han quitado los grifos de la fuente dejándola como un mojón, extraño mobiliario urbano. ¿Por qué quitan la fuente? Yo tenía sed, la hostia. "Se había estropeado", dirá el capullo de turno. (O bien: "Ya no era operativa", o "...daba una imagen tercermundista").  Ahora las mamás, que vayan a los chinos a comprar botellines. En cuanto a los vagabundos... directamente que les den por el culo. El que quiera beber, que se pida una cocacola, que hay que reactivar el consumo, y la economía, y el trabajo (basura).



domingo, 22 de mayo de 2011

RESCATE DE LA BOHEMIA


Curioso el reportaje que escribe Jaime Gonzalo sobre los escritores de la bohemia madrileña…Curioso sobre todo porque no aparece en ninguna publicación literaria sino en Ruta 66, veterana revista de rock. Eso sí, hoy día cualquier paralelismo que pudiera haberse establecido entre bohemios y rockeros queda invalidado. Desde que entró la moneda única, no hay bohemia que valga... Ya todo Cristo tiene que tener abierta cuenta bancaria, simplemente para poder hablar por teléfono.
 
En el artículo se rescata una vez más a los “consagrados”: Buscarini, Cansinos, Sawa, Carrere… También a Valle Inclán y Pío Baroja, bohemios de pastel, si se quiere, bohemios de temporada, que supieron aprovechar literariamente todo aquel material humano pero desmarcarse a tiempo del hambre, de la mugre y del sablazo. Hicieron bien.
 
Puestos a hablar de la boheme y del malditismo podíamos citar por derecho propio a Eugenio Noel, quien hizo su “gira perpetua” como orador antitaurino por España e Hispanoamérica, pasando hambre y calamidades. O a Carranque de Ríos, actor en el cine español, anarquista, vagabundo por la Europa de entreguerras…O a ese Ciro Bayo, guerrillero carlista y cómico en La Habana, peregrino de las Américas, que volvió a Madrid para acabar muriendo ciego en la buhardilla de rigor... Aventureros en pugna con la ambiental grisura hispánica, buscadores de los últimos resquicios de la libertad. Tipos idealistas que quizá en otro ambiente habrían corrido mejor suerte.

GRAFITTIS ENCONTRADOS EN CUENCA

Pinturas encontradas en una casa abandonada de las hoces del Júcar en Cuenca... Muestran un centro de poder oculto desde tiempos ancestrales, la energía maléfica que domina el mundo...

jueves, 19 de mayo de 2011

PERVIVENCIA DE LOS PUNA


Mientras todas las hordas descendían en manada hacia la Puerta del Sol, ellos permanecían incólumes en la barandilla de Gran Vía esquina Montera, rodeados de sus acólitos que quizá ahora intentaran convencerles. En su trayecto diario Tetuán-Chamberí-Gran Vía no les habría costado nada patear unos metros más y acercarse al gran hemiciclo. Pero... bajar a los Puna a Sol habría sido como bajar dos estatuas de su pedestal. Era para ellos una tarde más en su manifestación permanente. No necesitan salir a la calle porque todos los días están a pie de calle. Cuando pasen estas mareas y el pueblo vuelva al consumo, allí estarán los dos como prueba viviente de un Madrid que fue y que -tal vez- podría volver a ser. Dos clásicos en vida. Ellos pervivirán.

miércoles, 18 de mayo de 2011

EN LA PUERTA DEL SOL

Tomar la Puerta del Sol como símbolo, porque, como siempre, el palacio de invierno está vacío. Y aún así, dejan a sus esbirros para que lo custodien. Ya no se tortura dentro, pero desde allí se roba impunemente...
(Ahora hay fórmulas más sutiles de control, como decir que reivindicar tus derechos es perturbar la vida de la ciudad. Hipócritas...)

Algunos de los slogans más coreados:
-Menos policía, más educación
-Por qué manda el mercado, si yo no lo he votado
-PSOE, PP...la misma mierda es
-Cobrar 600 euros también es violencia
-¡Espe, Espe, Espe! ¡Especulación!

El mejor:
¡Ito, Ito, Ito...! ¡Botín, hijo de puta!

DEMOCRACIA REAL ¡ YA ! (En construcción)


martes, 10 de mayo de 2011

LAS RUINAS DEL BETI JAI

Ahora que van a declarar el frontón Beti Jai de interés cultural, aprovecho para rescatar una descripción de las ruinas del edificio -escrita diez o doce años atrás ¡Qué barbaridad! ¡Cómo pasa el tiempo!
…viejo edificio descubierto hace poco en Marqués de Riscal, a dos pasos de la Castellana, enfrente de la tienda de modas de Agatha Ruiz de la Prada.
Bajando por esa calle se ve un pasillo sumido entre dos edificios, una entrada para coches.
Un poco más adelante, un portal a oscuras, con piso de madera, que sale a un patio. Al patio se baja por unas escaleras. El patio es amplio y lleno de luz, con árboles centenarios; al fondo hay un chamizo que es un taller de coches. 


Desde el patio se ve el interior del edificio: una inmensa corrala arqueada, galerías con balconadas retorcidas en arabescos. Parece, sin embargo, que su función es meramente estética, no cabe una persona en esa especie de balcones corridos demasiado pegados a la pared.
 
Tendrá cuatro pisos, en algunos tramos hay huecos en la fachada y se ve el interior de la casa, de madera.
Entre el taller y la casa han arrumbado neumáticos, parachoques y otras piezas de automóviles.
El patio lo cierra otro edificio con una puerta tapiada, coronada por arco de herradura sobre el que se leen unas letras desprendidas que, con todo, se entiende que pone JAI ALAI, de lo que se deduce que en el patio había un frontón y que en las galerías estarían los palcos.
 
Por los pisos de madera de la casa corrala hay puertas condenadas, muñecas tiradas por el suelo…
Por las paredes destripadas entran los ruidos del taller y el piar de los pájaros.
En una habitación se ven pliegos para fundas de libro, todos con la impronta de la Editora Nacional, que debía de tener aquí su sede. 
 
Hay muchos pliegos de “La pintura española y los muertos”, de Manuel Sánchez Camargo, el crítico de arte que escribió un libro sobre Solana y que murió suicidado, según me contó Michi Panero (Camargo era amigo de su padre).
 
En el caserón hay también unos cuartos de baño principios de siglo, calendarios atrasados y unos techos con molduras vanguardistas que están medio desprendidos.
Por entre las vigas de madera cuarteadas, medio podridas y húmedas, entra el cielo azul.
 
También encontramos un viejo sombrero que guarda una apariencia de elegancia y de savour faire y en cuya badana se lee la dirección de una sombrerería de Nueva York.


lunes, 9 de mayo de 2011

DOS GATOS PEQUEÑOS

Hoy el padre de Boliche tiene dos cositas grises y vivas en las manos. "Le vendo estos gatos", me dice. "No, es que yo ya tengo dos". Boliche y el tío que están sacando montones de heno de una montaña amarilla le llaman al padre para que arrime el hombro. "Pues cójalos un momento", dice el viejo, imperativo.
Los gatitos -grises, atigrados- parecen hechos de alambre cubierto de borra/terciopelo. Uno de ellos acepta mi mano, manso, pero el otro salta y retuerce su cuerpecito sobre la tierra cubierta de espigas de trigo y boñias de vaca. Lo cojo y vuelve a escapárseme. Corre todavía sin esa celeridad de los gatos -tendrá unos quince días- como si tuviera un muelle, algo atrofiado por la falta de uso pero que así y todo le permite avanzar. "Déjele, hombre, no pasa nada", me dicen mientras el gatito se mete en una caja de madera que parece la caseta de un perro. "Los he guardado por si los quería, se los iba a regalar".

jueves, 5 de mayo de 2011

ANTONIO LOPEZ PINTANDO EN VALLECAS


Antonio López subía por las mañanas a la torre de los bomberos de Vallecas, donde el “parque de las tetas” y por ahí, porque estaba pintando un cuadro que quería mostrar la ciudad mineral en su lejanía…


Yo quería entrevistar al pintor y captar el momento mágico de la creación, pero López se lo tomaba con parsimonia. Tenía su teléfono y le llamaba por las mañanas. “No, hoy no voy a ir porque a lo mejor llueve”. Otro día: “Ahora a lo mejor no. Hay que esperar la luz de la primavera”.
 
Un día subí con un colega a la torre y ahí estaba el cuadro a medio hacer. Nos lo podíamos haber llevado y haberlo vendido en el mercado negro. Lo que había era un boceto: la ciudad desleída al fondo, en  tonos anaranjados, la línea de los rascacielos marcando la perspectiva. Era muy grande, pero los bomberos ni se habrían coscado. “¿Qué venís, a ver al pintor? Adelante, adelante”, nos dijeron. A lo mejor se creían que éramos ayudantes suyos o algo.
 
Al final Antonio López acabó el cuadro, quizá en pocos días, quizá tenía en su cabeza una síntesis de todas las luces del año… Esperanza le dio una pasta gansa pero es que el tío se lo había currado…

miércoles, 4 de mayo de 2011

NOCHE DE FUTBOL

Habíamos salido al atardecer, notando la ciudad extrañamente apaciguada. Recorríamos calles silenciosas, sin nadie y dejamos de oír los motores de los coches. Calles a oscuras, pues las autoridades, probablemente para ahorrar energía, habían ordenado cortar las luces, como hacen con frecuencia en los últimos tiempos… Barrio laberíntico de la Puerta del Angel: casas con jardín, corralas, esquinazos, escaleras que no conducen a ninguna parte. En el silencio y la oscuridad, el barrio resultaba doblemente fantasmal. Y de pronto caímos en la cuenta. “Hoy hay fútbol…” Y nos reímos: “No les debe de estar yendo muy bien, porque no se oye nada”. En vano esperábamos los vítores y los bocinazos, mientras recorríamos las calles abandonadas, creyendo que -como en las películas que veíamos con fascinación en la infancia- había llegado el momento en que la Humanidad se había extinguido.

domingo, 1 de mayo de 2011

99 AÑOS DE SABATO


De Sábato, más que de su narrativa, me acuerdo de las pullas que le lanzaban Bioy y Borges en aquel libro de conversaciones que podría haberse llamado el Biorges.
El Biorges era un tocho infumable de dos mil páginas. Si le hubieran dado con él en la cabeza, a Sábato o a cualquiera, le habrían dejado en el suelo.
No contentos con eso, ponían a todo el mundo a parir. Todo les parecía una mierda, menos lo que escribían ellos. En el caso de Sábato, no se metían tanto con su obra sino con el propio ES. Según ellos un figurante, una vedette del intelectualismo y los derechos humanos, un bocas ansioso de chupar cámara.
 
Como sólo tiene tres, yo me leí las novelas de Sábato dos veces. La verdad es que la primera vez me gustaron más que la segunda. “El tunel” lo recuerdo como un Dostoievski porteño y menor. “Abaddon el exterminador” me pareció que no estaba terminada, un borrador acumulativo de novela con capítulos sugerentes pero que no iban a ninguna parte. La que más me gustó fue “Sobre héroes y tumbas” (aunque algunos capítulos son de carcajada: esa Alejandra blasfema y sacrílega, desnuda bajo la lluvia, habría causado la indignación de los padres jesuitas). Pero la historia de Alejandra y Martín resiste por su atmósfera de misterio y como novela de adolescencia, crónica de esa sensación de decadencia que se tiene en la vida antes de empezarla realmente a vivir…