Ya lo decía –indignadísimo, le oíamos a través del patio de luces- Pedro Peña, nuestro vecino de Bilbao: “¡Pero mamá, en Burgos son TODOS unos fascistas!”. Era que el chico se hacía grande y no quería repetir el absurdo veraneo en tan levítica ciudad. Pero ahora Burgos –tradicional feudo del nacionalcatolicismo- da un ejemplo a €spaña entera, rebelándose contra sus jerarcas. La movida, la peatonalización de un barrio y construcción de un bulevar.
Sí, muy bonito, muy ecológico,
pero… los más de trescientos aparcamientos en superficie pasarían a un parking
subterráneo DE PAGO. La obra además contempla un presupuesto millonario, que se
llevaría un empresaurio local,
actualmente procesado por… Lo de siempre. ¿No os suena todo esto, amigos? Ayer,
manifestación, “vandalismo”, “destrucción de mobiliario urbano”. “Violencia
desproporcionada en Burgos”, titula el periódico adalid de nuestra democracia. Al
final harán el parking, o lo que les salga de los huevos, pero tomemos nota de la
resistencia de Burgos, ejemplar ciudad del orden, la cabeza de Castilla.
Buena leccion de la otrora capital de la España franquista ,a ver si corta un poco las alas a todos aquellos que ven una nueva epoca de esplendor auspiciados por este otro ilustre gallego,.
ResponderEliminarUn saludo a Peña.
Me sumo a todo lo dicho en post y comentario. Sólo un pequeño matiz: me parece que la famosa frase la pronunció Iñaki Peña
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