domingo, 25 de abril de 2021

RETORNO A MARMOTA

 

 Aquí empezó todo -2005, 2006- empezó, o terminó más bien, la vida estrictamente urbana, un regreso a los orígenes remotos (neandertales/cromagnones) nada que ver, nada, con los escritores neorrurales y sus veranos en casa de la abuela…



Aquí en Marmota las referencias eran culturales -comic cine libros etc. Recuerdo que el pantano del El Pardo me parecían las marismas del Príncipe Valiente, la cruz desgastada en el camino como sacada de Stevenson –David Balfour o El sr de Ballantree. 


Había que echarle imaginación y ganas para creer que Marmota era un entorno proustiano… Pero algo tenía el sitio. Em que venía a verme entonces lo llamaba "el veraneo de Onassis." Estábamos bebiendo litros mientras el humo se elevaba sobre el Pardo. Madrid muy cerca y muy lejos.

(Animales entrevistos: águila imperial cigüeña negra garza gris zorros jabalís nido de aviones, milanos rondando el puesto rasándolo volando más bajo según se terminaba e verano…)



sábado, 24 de abril de 2021

MONTE HELLMAN

 


Año 80, anuncian en Bi el reestreno de una peli rara de Monte Hellman: 2 lane blacktop –(Carretera asfaltada en dos direcciones). Apenas hay referencias sobre MH, salvo que es un director en la línea de Sam Peckinpah. Vamos a ver la peli un domingo o festivo de primavera  a unos cines pequeñitos y oscuros (pornos mayormente) que hay en las torres de Zabalburu –esas torres/rascacielos entre lo posmoderno, lo decadente y lo hiperurbano- tantos años después deben de ser decadentes sin más…

Vamos con mi hermano P y JB (Javi Beaskoetxea) no sé si somos los únicos espectadores de la película –creo recordar otro testigo fantasmal. P y yo que estamos en la onda, pero para mi sorpresa JB también se identifica con la película de Hellman, película en la que no pasa nada:

Dos jóvenes hipiosos que recorren los states haciendo carreras de coches, (encarnados por dos músicos: James Taylor y uno de los Beach boys) y llevan un coche viejo al que le cargan un motor potente, y compiten tb con un tío raro que va por libre (Warren Otes) unos años más viejo.

Salimos del cine de día. Creo que JB se olvida unas gafas en el cine (volvemos y no había nada). Molaba salir del cine con luz, y molaba ver películas que no pasaran nada –porque como en la vida tampoco pasaba nada al salir del cine te hacías la ilusión de que seguías con la película.

Two lane blacktop era cuando los yanquis querían hacer cine europeo, cuando hubo un vacío de poder en los estudios y los productores les daban pasta para rodar a los hippies (Dennis Hopper con Easy rider), pero tampoco mucha pasta pues rodaban muy barato, sin guión siquiera, no pasaba nada, los protagonistas casi ni hablaban

En esa peli de Hellman el silencio entre ellos es lo que crea la tensión, lo que da a entender relaciones y problemas no resueltos, y la carretera, y la película acaba creo recordar cuando la propia película se quema



(otra experiencia con el cine de Hellman viendo sus westerns raros con Jack Nicholson, en un cine igualmente vacío, pues eran los mundiales de Naranjito… El tiempo tampoco ha dado notoriedad al raro director experimental que muere esta semana siendo despedido como una de las influencias de Quentin Tarantino, que le llamó para que trabajara con él)

jueves, 22 de abril de 2021

MISTERIOS DEL BARRIO. LA QUINTA DEL SORDO

 

–este barrio de que estamos hablando se encuentra “al otro lado del río”, no en la parte de la ciudad sino en la de los arrabales. Pero estamos muy cerca del puente Segovia, Madrid Río, etc…  y desde los callejones se divisa –aparece y desaparece- el palacio de Oriente. Creo que el distrito fue el de Palacio. Recuerda, en ese sentido, esos pueblos apiñados en torno al palacio inalcanzable en el que vive un rey lejano e injusto-

En el barrio queda una plaza circular pequeña que debía dar entrada a la estación del tren. A un lado de la plaza en unas casuchas se lee que sobre el solar que éstas ocupaban se hallaba la famosa Quinta del Sordo, la finca donde goya pintó las pinturas negras.

Delante de la casa –casa de principios del siglo xx pero sin mayor gracia- veo a un rumano buscando en unos contenedores que mira con curiosidad un álbum de Asterix (en francés) que ha encontrado en la rebusca. Como si la pequeña plaza siguiera, tanto tiempo después, emanando sus irradiaciones artísticas.

Quinta del Sordo (maqueta)

Pero esa placa va de palo. La placa de la plaza. Ahí no estuvo la quinta goyesca sino unos metros más arriba, ocupando el barrio de topónimos cordobeses, y dado que fue demolida, la quinta, en 1909, tuvo que convivir con la estación de tren –posiblemente desde la quinta del sordo se veían las vías y andenes de la "estación Goya· : esta conjetura es mi principal aportación al tema, ya que todo lo demás que cuento se puede hallar en la red.

Los nietos de goya recibieron en herencia la finca con las pinturas negras (las cuales en un principio se exhiben allí, después son llevadas a FR, y queda el caserón como desmantelado sin las misteriosas pinturas) pero, hombre, tampoco es para venderlo, para vendérselo al típico hijoputa para que haga más casas…

Esto en FR no habría pasado, pero quién sabe si estas cosas son las que ponen la gracia en nuestra desangelada historia. De tan listos, somos tontos. Manteniendo el caserón, seguro que finalmente hasta habrían hecho más pasta... Yo antes iba mucho al Prado a ver esas pinturas negras de moda, pero cuando eran gratis.  (Antes de “Uropa”).

Por cierto, estos barrios del paseo de Extremadura son de los más abigarrados –y también densos y agobiantes de la ciudad (quizá por estar en vaguada, por lo pronunciado de sus pendientes: aquí tenían que correr arroyos hacia el Manz y quién sabe si por debajo del asfalto no siguen fluyendo). Seguiremos con los misterios del barrio. 

la quinta y ciudad al fondo

miércoles, 21 de abril de 2021

MISTERIOS DEL BARRIO. LA ESTACION GOYA.

 


Misterios del barrio. La estación de Goya.

El parque Cerro Bermejo, apenas un montículo de tierra entre las heterogéneas calles que rodean el paseo de Extremadura (por un lado) y por otro -bajando en vaguada- la calle Sepúlveda

*Muchas veces me había asomado a ese hueco entre la arboleda del parque cerro Bermejo tratando de dilucidar el origen de las extrañas decimonónicas casas construidas al arrimo del parque… Suelen tener delante coches lujosos, tienen su leyenda de ocupación y de tráfico…

Este barrio (Ptangel) es muy heterogéneo y hay calles que mirándolas en línea no tienen dos edificios iguales seguidos. Así junto al parque hay una urbanización setentera de casas de ladrillo, y por encima de estas una  colonia obrera (con topónimos cordobeses: calle de Rute, plaza Lucena, etc) colonia construida seguramente en la estricta posguerra. Podría verificar algunos de estos datos pero se trata de callejear no de navegar

Con la historia del covid –que todo dios anda por todos lados- nos metemos en el barrio de casas del parque. Pasa un chaval vestido de mecánico que lleva un balde con agua pero no dice ni mu.

No hay más remedio que buscar en la web. Enlazo una página cojonuda que cuenta la historia de la estación de tren de Goya -1891-1970: pequeño ferrocarril de vía estrecha que funcionó hasta 1970…que salía de la ciudad hacia el oeste, remontando la calle Sepúlveda –vaguada- (atravesando el hoy maqui barrio de lucero)…

(elmiradordedonfrenando.wordpress.com)

Todo apunta a que las casitas del parque fueran dependencias o almacenes o viviendas de los trabajadores ferroviarios. El tren cubría la ruta Madrid_Almorox (Toledo). (el tren hubo de tener su importancia bélica en la contienda para traslado de materiales) (años 50: aumenta el tráfico rodado y el tren queda para los excursionistas del alberche) (en algún tramo del recorrido se rueda el western 100 rifles)


De todos modos este tren nunca debió prosperar del todo, pues en vano se pretendió llegara –siguiendo hacia Extremadura- hasta Arenas de San Pedro que

ya cerca de Gredos

Sería bonito haber conocido –por qué poco no- ese Madrid un tanto bucólico, pueblerino, las afueras realmente… En los ochenta, la primera vez que conozco/oigo hablar de barrio goya, barrio lucero, tienen un punto rural, pero ya también de espacios marcados por la

Estas afueras antes de ser fagocitadas por la m30 y luego madrid río tenían que tener un punto bucólico (como contaré en la entrada dedicada a la quinta del sordo)