miércoles, 31 de mayo de 2017

UN SUEÑO


El coche me llevaba a través de la noche, yo iba en el asiento de atrás, dormido, alguien conducía, ¿un amigo?, me pareció que sí pero enseguida se borraron sus rasgos con esa volatilidad de los sueños. Sonaba una música ligera, una musiquita de jazz trompetera y animosa, que fue lo que me hizo despertar, y balbucear -pero por cortesía o porque pensé: Este se va a quedar dormido-: ¿por dónde vamos?, ¿queda mucho?, o algo así, siendo que me encontraba tan a gusto suspendido en la oscura carretera deslizante que no tenía prisa ninguna ni ganas tampoco de llegar a ningún sitio.

EN LA PLAZA VIEJA



Llevamos a la niña a la Plaza Vieja de VK y cuando llegamos se bajó del carrito y se adelantó hacia los columpios, donde bullían los niños. Pero se lo debió pensar un momento porque se dio la vuelta y, por si acaso, por si le decíamos que no, levantó una mano con la palma hacia nosotros y a la vez mostrando los columpios, mirándonos en un silencio que se cargaba de razones. -Ya que estamos, habrá que ir, ¿no? – si no, ¿para qué hemos venido?- Pero si no hay nada como esto, es lo mejor- Quedarse fuera sería absurdo… -cientos de significados en un gesto mudo que no era tanto de súplica como de lógica.

martes, 30 de mayo de 2017

EL PARAISO ENCERRADO

 


El paraíso encerrado, el parque fantasma donde al anochecer un gato negro huye despavorido al ver que se levanta el hombre de los tiestos para reunirse con el espantapájaros. El parque  prisionero, o la ciudad prisionera al otro lado del parque…
 
 
Carretera de Aragón para adelante, quedaba esta finca, hermosa y gótica, clausurada como en un cuento de Dickens o de las hermanas Bronte, sintiendo extenderse alrededor los tentáculos de la ciudad, inmemorial y lluviosa (1580): invernaderos y albercas, caballerizas y palacetes de piedra.

 
 
 
 
 

Pero llegó la bruja Esperancita y se la quiso regalar al Opus Dei (proyectos educativos + morro= $), vulnerando un acuerdo de los marqueses del Petoste con “el viejo profesor” para que se abriera al pueblo. Final prosaico del cuento… Pero llegó el hada Carmela y dijo al final de abrirla.

 
De afuera tras los barrotes veíamos la hermosa selva, sin posibilidad alguna de entrar. Abierta la encontramos el otro día, pero sin gente, sumergida en el silencio de muchos años, roto sólo por algunos mirlos que presentían la tormenta…


 


sábado, 27 de mayo de 2017

ASTOTXOA ZU BEZALA

 
Zoritxarrez horrela nago, itxituraren beste aldetik. Zergaitik gauzak konplikatzen ari dira? Ez dakit,inoiz  ez nekien…, baina batzuetan baietz pensatzen dut. Hitzak gehiegi, baina ekintza ez… Berriro betiko bidearen zehar. Gutxienez ez dut hemen erabaki behar.
 

Eta belarra hazi da baserri zahar gainean.
 

viernes, 26 de mayo de 2017

JOHNSON DIES


 

... sin tiempo para escribir otra obra maestra, releer Arbol de humo

LOS OJOS ABIERTOS: JOHNSON RETURNS

asislazcano.blogspot.com/2014/01/johnson-returns.HTML

miércoles, 24 de mayo de 2017

EL HIJASTRO


 
Quedamos y venía nervioso, azarado, para decirlo en plan literario, y yo lo achaqué a la emoción del novel que publica su primer libro, aunque en su caso hubiera sido a rebufo de otro, unas “memorias” de su vida con MP. Meses antes, se había presentado como el “hijastro” de M (sólo ese apelativo tenía que haberme puesto en guardia) y me pidió la transcripción de las memorias de M que había preparado yo años atrás. Le dejé el material –en  parte ya publicado- lo mismo que había hecho antes con otros.
Ahora me traía unas galeradas de su libro, que había titulado “Memorias trucadas”. Y tanto que trucadas… Aparte de los textos inéditos de MP había escrito él cincuenta páginas de las cuales ocho procedían de mi manuscrito, las únicas en las que se oía hablar a MP, que utilizaba sin rubor haciéndolas pasar por una conversación que había tenido él con M –la mayor prueba de imaginación de que había sido capaz…
Ni siquiera un asterisco, una nota a pie de página, sino que, tratando de borrar todas las huellas, me mencionaba muchas páginas más adelante como Asís Lezcano (sic) aludiendo vagamente a las “memorias”, que le habían servido “de ayuda”, sin referirse para nada a las conversaciones amañadas, sin distingos entre lo mío y su yo, y cuando le dije que al menos mi nombre había que corregirlo se llevó las manos a la cabeza y me dijo que ya no era posible, que ya estaba en imprenta el libro.
 
Entonces, ¿para qué traer las galeradas a toro pasado?, ¿no podía haberme llamado unos días antes?- y sí, venía muy nervioso, y con aire culpable, a lo mejor se esperaba algo gordo, unas hostias, una demanda, pero también con un as en la manga, que fue pedirme unos originales con la promesa de moverlos en la pequeña editorial que le había publicado, donde me dijo que había entrado como asesor, y uno, que es de reacciones postergadas, (y aún a sabiendas de que me engañaba pero no más de lo que se había engañado a sí mismo) hasta le tuvo que dar las gracias… Hasta hoy.
Hasta el otro día no había vuelto a hojear su libro. Lo encontré en la biblioteca de la Alhóndiga, jamás llegó el ejemplar prometido. Lo que más le delata es decir que “lo mejor de las memorias es que se le oye hablar a Michi”, o sea, tras apropiarse de los materiales hacerlos de menos, como quien disculpa llevarse de estrangis un puñado de bisutería... de ocho páginas.
Y ya puestos, ¿por qué no puso él la grabadora? Porque, con todo lo que ahora celebra a M el hijísimo, no recuerdo haberle visto aparecer por el hospital donde estaba Michi, a lo largo de todo el verano que grabamos las memorias.
 
También la voz de éste es lo mejor de su libro. El resto no vale nada. Llantos de plañidera, que si mi mamá bebía y papá no me hacía caso. Y uno cree entender algunas cosas. Pero también, que sacar en procesión a la familia “desestructurada” no es excusa para portarse como un capullo…
 

leopoldo maria panero visto por michi panero - los ojos abiertos

asislazcano.blogspot.com/2014/03/leopoldo-maria-panero-visto-por-michi.html