jueves, 27 de noviembre de 2014

UNA DE CORRUPTOS

 
Estábamos en la plaza de Pontejos y llegó el consiglieri, con su aureola dorada de carnero pascual, señorial y altivo, como terrateniente que encuentra la puerta de la finca petada de campesinos. Venía, secundado de guardaespaldas malencarados, a los que increpamos a razonable distancia.

-Granados, a ver si la Comunidad de Madrid cumple ya las sentencias del poder judicial. Fijos discontinuos ya.




 
La CAM –Consejería de Presidencia, con sede en esa ramoniana plaza Pontejos (de la que dependíamos como bomberos forestales

-Fi-jos-ya. FI-JOS-YA



El consejero nos oía como quien oye llover. Como ahora oirá la lluvia desde su confortable celda de Estremera (que inauguró en su día…)

A Granados le jodía “nuestra actitud” porque pretendía privatizar el servicio. Claro.

Todavía no se sabía nada, pero era vox populi,  tanto que yo pensaba que ni estaba penado (al menos seguro que no estaba perseguido), pero era vox populi y tenía cierta lógica: las contratas se dan a los amigos a cambio de una comisión o de favores.

 

2 comentarios:

  1. Menos mal que esta donde esta que le den lo suyo.https://www.youtube.com/watch?v=vBRIzmOWOpk
    A tu salud.

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  2. Aunque no soy de los Fitipaldis, me ha gustado la ubicación. Devastada pero entrañable Palanca bilbaina. Así que bienvenidos a este blog...

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