sábado, 9 de enero de 2021

NIEVA NIEVE

 


Nieva nieve, ayer empezó a caer a media tarde al tiempo en que en la tele echaban Valor de ley (la versión de John Wayne): las últimas escenas, la nieve, el cementerio, la niña, la nieve de la tele y la nieve de la ventana, la naturaleza un poco por detrás del arte… Luego la noche más nieve los amigos/as que trabajan en los hpitales, allí encerrados sí o sí, con los enfermos y los locos, full time, y afuera la peña esquiando y los coches patinando

-oiga jefe que no voy a ir esta tarde a trabajar, que igual nieva

-va usté a tomar por culo


La noche amarilla y la mañana blanca


No me entusiasma la puta nieve, pero salgo esta tarde arrostrando el temporal, un poco acojonado por lo que contaban los mass media, he cogido el chamarrón, las botas y el verduguito -ropa que nos dan en las torres y casi nunca suele valer para nda (ahora sí)- también unos pantalones/plumas, y la makila, con lo cual la peña se apartaba a mi paso como si fuera el gitano Antón (o Tuareg) tampoco era para tanto


Goya en la nieve

lo mejor el silencio, el silencio y los muñecos, los semáforos parpadeando y los pinucos caídos, (lo que más me ha chocado: ver a una chica, muy joven, esquiando, con una pierna de titanio)
bajo al río que me recuerda el Londres nevado, el Tamesis helado en Orlando de Virginia Woolf, bajo a las carreteras de circunvalación con un palmo de nieve



-pero oiga profesor, con todo lo que estamos viendo, pero no decían que el hombre había dominado por fin a la naturaleza, o sea, sabe lo que le digo, no?

-no, si ya… pero esto es muy bueno pal campo


No hay comentarios:

Publicar un comentario