jueves, 24 de enero de 2019

LAS CASITAS DE COLORES

Benjamín Palencia: Niños de Vallecas (1940)
Voy a ver a Aitor a Pueblo de Vallecas. Vive a diez minutos del metro y el bulevar, en lo que se conoce como las casitas de colores.
Estas casitas eran de protección oficial hasta que la CAM se las vendió a un fondo buitre, que pasaron de costar 200 euros a 600 al mes…
-Para eso te habías quedado en Cuatro Caminos, tío.
Bajamos al chino por coca cola y un litlo. Entramos a un bar de madera blanca que han abierto debajo de la casa de Aitor y hablamos con unos que han venido de Bilbao, porque Vallecas es ya universal…
Tampoco se está tan mal aquí, lejos de todo, en el atardecer gris, aunque no haya mucho que hacer. Fumamos, miramos el campo manchego, echamos comida a unos gatos. Subimos a la casa a echar un tarot a ver el azar qué depara.

2 comentarios: