martes, 10 de mayo de 2011

LAS RUINAS DEL BETI JAI

Ahora que van a declarar el frontón Beti Jai de interés cultural, aprovecho para rescatar una descripción de las ruinas del edificio -escrita diez o doce años atrás ¡Qué barbaridad! ¡Cómo pasa el tiempo!
…viejo edificio descubierto hace poco en Marqués de Riscal, a dos pasos de la Castellana, enfrente de la tienda de modas de Agatha Ruiz de la Prada.
Bajando por esa calle se ve un pasillo sumido entre dos edificios, una entrada para coches.
Un poco más adelante, un portal a oscuras, con piso de madera, que sale a un patio. Al patio se baja por unas escaleras. El patio es amplio y lleno de luz, con árboles centenarios; al fondo hay un chamizo que es un taller de coches. 


Desde el patio se ve el interior del edificio: una inmensa corrala arqueada, galerías con balconadas retorcidas en arabescos. Parece, sin embargo, que su función es meramente estética, no cabe una persona en esa especie de balcones corridos demasiado pegados a la pared.
 
Tendrá cuatro pisos, en algunos tramos hay huecos en la fachada y se ve el interior de la casa, de madera.
Entre el taller y la casa han arrumbado neumáticos, parachoques y otras piezas de automóviles.
El patio lo cierra otro edificio con una puerta tapiada, coronada por arco de herradura sobre el que se leen unas letras desprendidas que, con todo, se entiende que pone JAI ALAI, de lo que se deduce que en el patio había un frontón y que en las galerías estarían los palcos.
 
Por los pisos de madera de la casa corrala hay puertas condenadas, muñecas tiradas por el suelo…
Por las paredes destripadas entran los ruidos del taller y el piar de los pájaros.
En una habitación se ven pliegos para fundas de libro, todos con la impronta de la Editora Nacional, que debía de tener aquí su sede. 
 
Hay muchos pliegos de “La pintura española y los muertos”, de Manuel Sánchez Camargo, el crítico de arte que escribió un libro sobre Solana y que murió suicidado, según me contó Michi Panero (Camargo era amigo de su padre).
 
En el caserón hay también unos cuartos de baño principios de siglo, calendarios atrasados y unos techos con molduras vanguardistas que están medio desprendidos.
Por entre las vigas de madera cuarteadas, medio podridas y húmedas, entra el cielo azul.
 
También encontramos un viejo sombrero que guarda una apariencia de elegancia y de savour faire y en cuya badana se lee la dirección de una sombrerería de Nueva York.


1 comentario:

  1. Si te interesa ver el estado actual del Beti-Jai te paso estas transparencias para que le eches un vistazo:

    http://es.scribd.com/doc/53731849/Conferencia-en-la-expo-El-Universo-de-la-Pelota

    Espero que sea de tu interés.

    Salu2,

    Plataforma "Salvemos el Frontón Beti-Jai de Madrid"

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