jueves, 20 de julio de 2017

POUR LA FRANCE

Al cruzar la muga, viendo los pequeños cementerios en las afueras verdes de los pueblos vascofranceses, sentía piedad por aquellos muchachos sacrificados en las trincheras de la grand guerre, algunos de ellos primos traspirenaicos, Lascano, Lascanotegi, sacrificados en batallas que debieron de diezmar aldeas y pueblos, testimonio de barbarie pero en cierto sentido de comunicación entre las naciones, conflagraciones de las que ensimismada quedó excluida la piel de toro, esperando unos pocos años su propia carnicería...


   
 

2 comentarios:

  1. Aupa Dragón!, Gora Laskanoak!, Biba Xiberu! Ederra kontue!

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